1. Mantener en buen estado los productos tapizados de piel, cuero o regenerado de cuero.
Para mantener a largo plazo la belleza de los productos tapizados de piel, cuero o regenerado de cuero hay que seguir estos consejos muy sencillos:
- Desempolva periódicamente las superficies con un paño limpio, seco y suave.
- Mantén el producto lo más lejos posible de fuentes de calor, como por ejemplo radiadores y estufas.
- Evita lo más posible la exposición a la luz solar directa o a fuente luminosa artificial muy intensa.
- No hay que utilizar los productos tapizados de regenerado de cuero para el exterior y/o en areas abiertas al exterior, porque este material sufre el exceso de humedad.
- Eventuales marcas naturales, imperfecciones y cambios de color respecto a la muestra no se consideran defectos, sino elementos que caracterizan la piel o el cuero verdaderos, y que por tanto, certifican su autenticidad.
2. Limpieza de los productos tapizados de piel, cuero o regenerado de cuero.
- Actúa con rapidez para evitar al máximo que las manchas puedan penetrar en profundidad.
- No utilizar disolventes o productos abrasivos.
- Para limpiar las manchas solubles en agua (por ejempo bebidas, café, vino, etc.) absorber inmediatamente con un paño seco o con toallas de papel.
- Para quitar manchas residuales utiliza productos específicos para la limpieza de la piel, disponibles en comercio, siguiendo con precisión las instrucciones del fabricante. Como alternativa puedes utilizar un paño ligeramente humedecido con cantidades pequeñas de jabón suave muy diluido en agua fría.
- Procede de afuera hacia el centro de la mancha, sin presionar ni fregar enérgicamente. Seca cuidadosamente la superficie con un paño limpio o con toallas de papel. Repetir la operación si es necesario.
- Para limpiar manchas constituidas por sustancias grasas de base oleosa (por ejemplo aceituna, chocolate, aliños, mantequilla, snacks, cosméticos, etc.) actúa en dos fases:
a) Quita en la medida de lo posible el exceso de producto con una espátula de plástico o con una cucharilla, sin fregar la piel.
b) Seca ligeramente y repetidamente la superficie que debe ser tratada con toallas de papel o con talco, actuando de afuera hacia adentro de la mancha, sin presionar para evitar que la suciedad entre en los poros de la piel. Utiliza siempre y únicamente productos específicos para la limpieza de la piel, disponibles en comercio, siguiendo con precisión las instrucciones del fabricante.
- Para limpiar manchas de suciedad seca: cepilla con cuidado la superficie utilizando un cepillo de cerdas suaves.
- Para más informaciones dirigite a tu limpieza en seco de confianza.